por José Luis Mendoza Aubert

¡No puede ser! En San Miguel de Allende, estamos hartos de la violencia y la inseguridad que nos rodea. Hace algunos días hubo una balacera en la que una menor perdió la vida y su padre resultó herido. ¡Es inaceptable! Y lo peor es que Guanajuato es el estado más violento de México, lo que nos hace sentir aún más inseguros.

Además, ¿qué pasa con el aumento del entretenimiento digital violento y la exposición de imágenes impactantes? ¡Estamos hartos de ver tanta violencia en todas partes! Y encima, el aumento del estrés debido a la falsa pandemia y el costo de la vida nos están afectando a todos. No podemos soportar más el miedo y la ansiedad que esto nos causa.

Pero lo que más nos preocupa es el aumento de los secuestros de mujeres menores y el feminicidio. ¡Esto es inaceptable! No podemos permitir que esto siga sucediendo en nuestra ciudad. Necesitamos medidas para mejorar la seguridad y reducir la violencia en nuestras comunidades, como programas de prevención de la violencia y la delincuencia.

Es muy importante fomentar la empatía y la compasión en las personas, y promover la resiliencia emocional para ayudarnos a lidiar con el estrés y la ansiedad. ¡No podemos permitir que la violencia y la inseguridad nos afecten emocional y físicamente! Es hora de tomar medidas y proteger nuestra ciudad, nuestra sociedad y en especial a los niños y niñas.

Normalizar la violencia puede tener graves consecuencias físicas y emocionales para el ciudadano común. Además, la normalización de la violencia puede generar miedo, ansiedad y estrés en las personas, lo que puede afectar su bienestar emocional y mental. Las personas pueden sentirse atrapadas en un ambiente de inseguridad e incertidumbre, lo que puede llevar a trastornos de ansiedad, depresión y otros problemas de salud mental.

En términos físicos, estar expuesto constantemente a la violencia puede aumentar el nivel de estrés y ansiedad en el cuerpo, lo que puede tener efectos negativos en el sistema inmunológico y aumentar el riesgo de enfermedades físicas. Además, las personas pueden desarrollar trastornos del sueño, dolores de cabeza, problemas digestivos y otros problemas físicos debido a la tensión y la ansiedad que se acumulan a causa de la violencia.

En cuanto a las consecuencias emocionales, normalizar la violencia puede tener un efecto desensibilizarte en las personas. Es decir, pueden perder su capacidad de sentir empatía y compasión por los demás y por las víctimas de la violencia. Esto puede tener efectos negativos en la capacidad de las personas para relacionarse con los demás, y también puede llevar a la aceptación de la violencia como algo normal.
Que piensas hacer tú hoy para cambiar esta situación

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José Luis Mendoza Aubert:

Actor, director y técnico teatral. Maestro y escritor de Teatro y Artes Plásticas. Fundador y director de la compañía y escuela de teatro la Comedia del Universo, funcionando en San Miguel durante los últimos 20 años. Musicólogo y cinéfilo, juez del Festival de cine En Corto ahora GIFF por 8 años. Director de Arte y Cultura de la Biblioteca Pública por 15 años. Miembro del Consejo de Directores del Sindicato Centro Cultural Comunitario. Da pláticas y talleres de conciencia del medio ambiente en escuelas y comunidades. Miembro fundador del Colectivo Allende la Cultura. Toca música Veracruzana y escribe poesía. Miembro fundador del grupo de música Jarocha "Soledad".

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